Fyffes, la marca de frutas más antigua del mundo, surgió para vender plátanos canarios en el Reino Unido
Hace 130 años, tras unas vacaciones por razones de salud, Edward Wathen Fyffe comenzó a exportar plátanos de Canarias al Reino Unido. Fue una idea que surgió en las islas. Era la primera vez que veía plátanos y consideró que el mercado británico sería goloso para esta fruta. Fyffes es el nombre del imperio mundial de la fruta.
En Gáldar, en Sardina del Norte, todavía de aquella época el «Muelle Fyffes» como homenaje a este emprendedor británico que canalizó las exportaciones agrarias de la isla. También en Tenerife existe el siniestro recuerdo de la prisión Fyffes que estuvo funcionado entre 1936 y 1950.
El tratamiento para la tuberculosis no era para Edward Wathen Fyffe sino para su esposa, Stanton Brown, con la que tuvo dos hijas. Él, era mero acompañante, ocupó su tiempo libre mientras su esposa se sometía a tratamientos visitando fincas del norte de Gran Canaria. Se quedó perplejo de una cosa: la calidad de la agricultura de las islas Canarias. Así surgió el imperio mundial de Fyffes. De hacer turismo en las islas.
Calidad
No era nuevo en el negocio agrario. La familia tenía intereses en la teína. Regresó al Reino Unido y convenció a su padre para dejar el comercio con infusiones. A su juicio, el futuro estaba en el plátano. Ahora es el primer proveedor de plátanos de Europa y el cuarto en Estados Unidos.
Unos años después, en 1896 la firma se asoció con Hudson Brothers para distribuir en el Reino Unido. Fyffe, natural de Liverpool, abandonó la empresa que cotizaba bajo su nombre el año siguiente, 1897. Una noticia publicada en el «London Gazette» muestra que su participación en el negocio platanero terminó el 30 de junio de ese ejercicio. Dejó la dirección pero siguió pendiente de ella.
En el diario británico «Inverness Courier», el primer exportador de plátanos de Canarias decía el 17 de mayo de 1892: «La industria del plátano en el Reino Unido es de origen reciente. Una línea de vapores de Liverpool hace unos seis o siete años comenzó a llevar plátanos de Canarias en sus viajes de regreso desde la costa oeste de África».
Y agregaba: «Al principio como una especulación, pero ahora como una carga más rentable, la demanda de esta fruta rica y deliciosa ha aumentado a pasos agigantados y las importaciones se pueden contar por miles de toneladas, y estas islas Canarias se están transformando en jardines de mercado, y las millas de tierra ahora producen plátanos para nuestros mercados y mesas».
130 años de cooperación económica en Canarias
En Canarias, Fyffes mantiene acuerdos estratégicos con agricultores isleños y sigue siendo fiel a la fruta de Canarias aunque tiene múltiples intereses financieros en el abastecimiento mundial. Así. tiene un acuerdo con Coplaca, uno de los mayores operadores de plátanos de las islas en España y que creció de forma decisiva por el papel de Leopoldo Cólogan, cuando se estructuró la OCM del plátano en 1993.
La ordenación del negocio del plátano se hizo bajo mandato de Felipe González y de Pedro Solbes, que era ministro de Agricultura. Hubo que superar hasta una batalla comercial con Estados Unidos que José María Aznar defendió junto a la entonces ministra del ramo agrario, Loyola de Palacio.
130 años después de la idea surgida en Canarias, Fyffes maneja anualmente 70 millones de cajas de plátanos, melones, piñas tropicales y setas. El presidente de Fyffes, David McCann, apunta que «marcando 130 años en el negocio del plátano, tenemos nuestra mirada en las generaciones de gente maravillosa y socios que han contribuido a nuestro éxito durante esos años y en los que estarán con nosotros a medida que avanzamos».
McCann destaca el papel de las islas Canarias en la creación de la empresa. Con la tuberculosis de la esposa del fundador de Fyffes, «fue en Canarias donde vio por primera vez las exóticas frutas amarillas que hoy en día son un alimento básico en el hogar».
Edward Fyffes comenzó a buscar maneras de transportar los plátanos a Londres, «finalmente tuvo éxito y estableció la compañía conocida hoy como proveedor líder de plátanos». Fyffes es europea pero su mayor accionista es japonés, Sumitomo, que ha ayudado a que Fyffes crezca en plantas de maduración y distribución. «Nuestras relaciones comerciales con grupos de productores se remontan a cinco décadas en algunos casos y el trabajo con la comunidad ha sido en beneficio mutuo», detalla el presidente de Fyffes. La empresa ejecuta programas de responsabilidad social en Colombia basado en el sistema educativo, tiene una agenda de reforestación en Costa Rica.
Fuente: https://bit.ly/2Gcl2dL