Marruecos y Brasil han sellado los primeros avances para que el puerto de Dakhla Atlantique sea el el hub de negocios de granos que triangule con Sines. Brasil absorbió el año pasado 1.200 millones de dólares de las exportaciones marroquíes, es decir, uno de los principales socios comerciales de Rabat, que se espera que abra un consulado en el sur de Marruecos antes de 2022.
Marruecos ha ofertado espacio prioritario en zonas francas en los puertos marroquíes, en particular el de Tánger Med y el futuro Dakhla Atlantique para las empresas brasileñas no solo para acceder a los mercados africanos, sino también a los países de la Unión Europea, Canadá y Estados Unidos a través de la reexportación, dado que Marruecos ya ha firmado acuerdos de libre comercio con estos países.
Este mes de marzo, Morocco Foodex acaba de registrarse en el Sistema Siscole brasileño para emitir certificados sanitarios a empresas marroquíes que deseen comercializar la industria alimentaria del país en el mercado brasileño (productos lácteos, aceite de oliva, industria vitivinícola…). Inicialmente la idea era ubicarse el circuito con Tánger Med pero el norte del país será complementario. ¿Razones? el tráfico marítimo de fosfatos para la agricultura brasileña desde el sur de Marruecos.
Por el lado de los servicios, Marruecos pretende hacer de la logística marítima un elemento estructurante de su asociación con Brasil, a través de las terminales portuarias de Tanger Med y, a medio plazo, de Dakhla Atlantique, que deberá posicionarse como las dos empresas logísticas y comerciales. Hubs para la agroindustria brasileña, a escala del Atlántico y del Mediterráneo, respectivamente.
En definitiva, Marruecos y Brasil están plenamente comprometidos con una alianza ambiciosa, centrada en sectores de alto valor añadido y que refleja la elección estratégica de los dos países en términos de integración de cadenas de valor e internacionalización, como así lo demuestra su adopción de las “buenas prácticas” de la OCDE en términos de seguridad jurídica, regulación del mercado y transparencia financiera.
En este espíritu, los dos acuerdos bilaterales que se encuentran en proceso de finalización (asistencia administrativa en materia aduanera e intercambio automático de datos) contribuirán a fortalecer la asociación. Un factor clave en esta dinámica de cooperación económica sostenida: los dos países están en proceso de construcción de un acuerdo político de larga data enmarcado por varios acuerdos que afectan diferentes áreas, incluido el acuerdo de facilitación de inversiones firmado en 2019.
En enero de este 2021, Marruecos encabezó la lista de países árabes exportadores a la mayor economía de América Latina, con más de 100 millones en productos exportados, un valor un 95,5% superior al del mismo mes de 2020. El año pasado, las exportaciones marroquíes al mercado brasileño aumentaron un 17,4% en términos de ingresos y un 32% en volumen, observa Tamer Mansour, secretario general de la Cámara de Comercio Árabe-Brasileña.
Para Mansour, estas cifras muestran que «en términos de intercambio, estamos asistiendo a una dinámica de maduración en las relaciones entre Brasil y Marruecos, gracias en particular a un trabajo de acercamiento político entre los dos países». En el sentido contrario, las exportaciones brasileñas a Marruecos aumentaron un 43% el año pasado, sumando 671,28 millones de dólares, impulsadas en particular por un aumento significativo en la exportación de pollo, que creció un 49,2% en volumen y un 3,4% respecto a las ventas de 2019.
Marruecos tiene un superávit comercial con el gigante sudamericano, que se ha convertido en el tercer socio más importante de Marruecos, solo por detrás de Francia y España. Marruecos es un proveedor esencial de fertilizantes y fertilizantes para la agroindustria brasileña. Sin esos productos, Brasil nunca sería la potencia agroindustrial que es hoy por el uso en las vastas tierras del Cerrado (más del 20% del territorio brasileño), donde no hay forma de que puedan prescindir de fertilizantes. Brasil, que tiene una buena relación con Marruecos, asumirá la presidencia del Mercosur en 2021, lo que podría dar a los dos países la oportunidad de moverse y avanzar hacia la firma de este acuerdo que probablemente ampliará la gama de productos comercializados en ambas partes.