Fuentes cercanas al puerto de Cádiz hablan de que le suena a “locura” el hecho de que Vicente Boluda se pueda estar planteando la compra de Trasmediterránea dada la delicadísima situación económica que atraviesa la naviera ahora en manos de Antonio Armas.
Mientras tanto, por parte de Trasmediterránea, un único comunicado y muchos desmentidos, unos con mejores formas que otras, en el que la antigua compañía de la familia Entrecanales afirmaba que “Naviera Armas logra un gran avance en el proceso de refinanciación de su deuda. Ha llegado a un acuerdo de ‘standstill’ con bonistas que representan el 72% de los bonos emitidos, en el plazo indicado de gracia de 30 días desde que se anunció el inicio de estas conversaciones. El pacto de ‘standstill’ entre ambas partes, tiene como objetivo cerrar un acuerdo de refinanciación que se espera cerrar antes de final de año. Asimismo, las partes trabajan conjuntamente para proporcionar liquidez, en breve, a la compañía, cerrando un crédito a corto plazo al objeto de superar la crisis generada por el Covid-19″.
Pero esta mañana, El Confidencial publicaba en sus redes que “según han confirmado varias fuentes próximas a las conversaciones, Boluda Corporación, el grupo valenciano controlado por Vicente Boluda, se ha mostrado dispuesto a comprar Transmediterránea a la familia Armas, que en 2018 la adquirió por cerca de 400 millones de euros. Esta operación supuso apalancar el ‘holding’ canario, que ahora no puede hacer frente a los cerca de 800 millones que adeuda a bancos y bonistas”.
La citada fuente que indica que todo esto le suena a “locura” indica que ante la delicada situación financiera de Trasmediterránea y mientras la principal compañía marítima española de tráfico de pasajeros y de carga ultima un acuerdo con los acreedores para mantenerse a flote son los mismo competidores que hace tres años, cuando se ultimó la compra de Trasmediterránea por parte de Antonio Armas, se postulaban como posibles compradores, los que ahora están saliendo de nuevo a la luz para “rescatar” Trasmediterránea en el caso de que la operación financiera que ahora está llevando a cabo no le saliera bien.
Entre tanto, los trabajadores de Trasmediterránea son los que ahora están sufriendo en sus carnes la incertidumbre sobre el futuro de esta importante naviera que mantiene una relación estrecha y centenaria con el puerto de Cádiz. Por eso, desde CCOO informa que el pasado 24 de noviembre, la representación legal de los trabajadores y la propia empresa, los portavoces de Trasmediterránea acudieron “con las manos vacías y sin información relevante que clarifique el verdadero rumbo que va a tomar la empresa”. Para CCOO, la situación que golpea a la compañía no son sus problemas, sino los “síntomas de una mala gestión”.
Cabe recordar que en octubre de 2017, Acciona vendía su participación del 92,17% de Trasmediterránea al grupo Naviera Armas, una adquisición que vino acompañada de un buen número de despidos y traslados que afectaron, sobre todo, al personal de tierra de la compañía.
Para el sindicato, el grupo Armas “ha carecido de una estrategia y proyecto de futuro desde el principio de la adquisición de Trasmediterránea, sirviéndose de ella como dique de contención contra la flota de Armas. Su táctica ha sido sobrevivir de la inercia establecida, pero la Covid-19 ha precipitado este planteamiento y ahora sin un plan B, el sindicato teme que la solución sea vender el alma de la naviera a los fondos de especulación”.
Así las cosas, CCOO solicita encarecidamente la necesidad de mantener Trasmediterránea a flote, por dos razones fuertemente ligadas, según el sindicato. De una parte, el importante volumen de empleo que la compañía genera para el sector de la marina mercante española y, de otra, por la histórica e imprescindible labor de conexión que realiza para “mantener España vertebrada”.
Mientras tanto, Boluda Corporación Marítima ha cumplido ya su primera semana de servicio diario marítimo entre Cádiz y Canarias y entre Cádiz y Sevilla, gracias a un feeder que fleta diariamente Boluda para traer hasta el puerto gaditano todas las mercancías que llegan hasta la capital andaluz procedentes del resto de España.
Por su parte, también es cierto que entre rumores de compra y notas de prensa por parte de Trasmediterránea hablando de estrategias financieras para mantenerse a flote, la naviera anunció sustituyó en Cádiz el superfast Baleares por el Villa de Tazacorte tras su paso por el astillero de Santander, donde se le están instalando los “scrubbers” depuradores y ha sido pintado con la nueva imagen corporativa de Trasmediterránea. Esta operación de maquillaje conllevó también el rebautismo del buque que dejó de llamarse José María Entrecanales para pasar a denominarse Villa de Tazacorte.
Fuente: https://bit.ly/3meFNVs